Tras la brutal actuación de Lady Gaga junto a Metallica en el escenario de los pasados Grammy, se había generado mucha expectación con respecto a una posible colaboración de la Germanotta en un álbum conjunto. La posibilidad se desvanece con las declaraciones de James Hetfield.
Despues de brillar con su show en la Super Bowl el pasado domingo, LadyGaga ha vuelto al plano mas hot de la actualidad. La Germanotta acaba de confirmar su siguiente nueva actuación estelar en la noche de los Grammy el próximo 12 de febrero. Lo curioso es que lo hará junto a Metallica. ¿Sorprendidos?
#1¿Quién nos lo iba a decir a nosotros? ¿Un grupo como Metallica? ¿Una orquesta de instrumentos clásicos? Parece totalmente incompatible. Pero he ahí lo maravilloso que es el mundo de la música, donde una combinación tan inusual tiene un resultado tan magnífico. Metallica y La Orquesta Sinfónica de San Francisco.
Hay que decir que se trata de un doble cd (11 pistas el primero y 10 el segundo). Aparte también se vende el vídeo del concierto en directo donde está grabado, y es fantástico contemplar la espléndida puesta en escena.
La orquesta se adapta perfectamente al grupo de rock, y viceversa, de una forma asombrosa.
En este trabajo es muy, pero que muy difícil,
destacar unos temas sobre otros, porque es completísimo. Pero si hay que quedarse con alguno por encima de todos, ese es "One".
#2A este grupo se le puede llamar uno de los grandes y desde luego el mejor grupo de Metal que existe actualmente por lo menos desde mi punto de vista.
Desde luego si esto no había quedado claro Metallica ha conseguido con este álbum enseñarnos momentos grandiosos de un concierto, James, su guitarra y los demás componentes del grupo consiguen hacer afición.
Este álbum está integrado por veinte canciones interpretadas en riguroso directo donde podemos encontrar las mejores canciones del grupo como “One”, “Nothing else matters”, “Devil’s dance” o “Battery” que al ser en directo incluso nos hacen vibrar todavía un poco más si hemos tenido la suerte de acudir a algún concierto de este magnifico grupo.
No nos podemos olvidar de mencionar también una de las grandes “Master of puppets”, una de las canciones que junto “Nothing else matters” fue de las mas esperadas en el concierto donde S&M fue grabado.
En fin, de este grupo cabe destacar que su gran manera de interpretar sus temas hacen que se conviertan en uno de los grupos que a lo largo de toda su trayectoria musical se hayan convertido en el mejor grupo de metal.
#3A mí en lo personal Metallica se me hace un grupo súper cabron y muy bueno pero estoy en desacuerdo con “chychy” el dice que Metallica es el mejor grupo de metal que existe actualmente, pues eso no es cierto ya que hay bandas mas fregonas de metal, el dice eso de Metallica porque desgraciadamente es uno de tantos pobres weyes que no conocen de música y solo se van por las bandas que se comercializaron mucho. Así que te doy un consejo amigo antes de escribir mejor cultivate mejor comenzando por el rock no te quieras ir a lo grande sin saber nada de música. Y al disco le doy un 5 porque el verdadero metal no se mezcla con nada.
#12metallica es el mejor grupo de todos y la idea de combinar la simphonica y el metal de esa forma fue lo mejor, y a pesar de que algunos dudaron de esto fue un exito total.
Las que mas me gustaron fueron "one", "master of puppets", "battery" y "of wolf and man"
#13Aquí tenemos de nuevo a los amigos de Metallica, esa banda "tan grande", en palabras de alguien tan imparcial como Lars Ulrich, que puede hacer lo que le salga de la bolsa escrotal y luego sonreir beatíficamente cual niño travieso. En esta ocasión decidieron colisionar, me parece el término más ajustado, una orquesta sinfónica al completo contra su música. Una idea de Cliff Burton, parece ser, que ya estaba pensando cuando se cambiaba de litera en la furgoneta que había que hacer una cosa así. La verdad es que suena a excusa, ya que los muertos, al fin y al cabo, poca opinión pueden formarse.
Y digo bien, colisionar. No fueron los primeros en hacerlo (unos tales Deep Purple ya trabajaron este concepto con repercusión limitada hace más de treinta años), pero quizá sí los primeros en hacerlo con los cojones por bandera. Con esto me refiero a que no conceden absolutamente nada a la Filarmónica de San Francisco. Metallica, que, reconozcámoslo, no se distinguen por un directo sobresaliente, interpreta con desparpajo esta mole de dos discos donde se lamen solidariamente sus mismos cojones mientras una orquesta abre a cuchillo sus interpretaciones.
Y digo bien de nuevo, ya que los chicos de la Bay Area (es un decir), no hacen el mínimo esfuerzo por integrarse en lo que les podría ofrecer una maldita orquesta sinfónica. El amigo Michael Kamen, que puede ser cualquier cosa menos mal compositor o mal director de orquesta, se encarga de personalizar todos los contrastes posibles en una obra de encargo en cuya mesa de producción se juntó a los sempiternos Ulrich, Hetfield y el ubicuo Bob Rock, que ya se había encargado de hundir a los fans más tradicionales de la banda mediante los manidos Load y tal. Los fab four del Metal se limitan a una interpretación de manual de muchos de sus clásicos, con tal nivel de sobreproducción que hasta Cuericaeno y yo aporreando una acústica y gritando cosas sobre falos sonaríamos cual ángeles de San Gabriel. Las más que limitadas habilidades instrumentales del grupo quedan afiladas, profundas, cavernosas. La voz de Hetfield, tras un esclavo trabajo de sonido, me temo, suena como si el multimilonario amante de los coches horteras supiera cantar y todo, lo cual ya de por sí, conociendo su pura imposibilidad de mantener el tono en un concierto de, digamos, un cuarto de hora, ya debería sonar a gloria celestial a los verdaderos amantes del asunto.
Evidentemente, Ulrich, que es el que maneja los hilos comerciales de Metallica mientras pueda servir una cantidad constante de cerveza a Hetfield (y estoy hablando de esta época en concreto, antes de que algún purista me recuerde el Some Kind of Monster y aquella supuesta terapia de rehabilitación) puede ser un pigmeo, pero no es idiota. "S&M", aparte de un trabajadísimo juego de palabras y un logo la mar de original, es un gigantesco capricho de una banda cuya inmensidad comercial ya escapa incluso a las firmes tenazas de su avezado batería.
Dejada atrás la rabia juvenil que desembocó en el aburridísimo And Justice For All (todo comentario sobre esta opinión será ignorado) y se hizo maduro, dios me asista, con Load y Reload, Metallica pone al servicio de esa colisión entre orquesta sinfónica y limitación instrumental una serie de temas de su repertorio clásico y menos clásico, con un par de canciones seminuevas para atrapar a los más incautos e incluso a Juan Pablo II, que como mantengo poseía junto a su colección de encíclicas el cd del álbum negro.
Y eso supone este S&M, un nuevo paso hacia el mainstream, el orgasmo del fan incondicional a través de la "valentía" de lijarse contra una orquesta bien avenida, y aún así tiene su valor. Un servidor, acostumbrado a los excesos instrumentales de bandas como Dimmu Borgir cuando reunieron diez euros, no encuentra en este disco nada que le sorprenda o suene realmente original. Es más, hay temas, como "Call of C'Thulu", "One", "Sad But True", "Wherever I May Roam" o "Nothing Else Matters" son como tostadas esperando que las unte un elaborado trabajo de instrumentación clásica. Realmente ningún tema (ya que yo, como crítico de Metallica, he tenido a bien cumplir la penitencia de engullir todos sus discos) parece subordinado al trabajo orquestal. El grupo toca lo que le da la gana y ya si eso Kamen se acopla como pueda. Sólo por eso el trabajo del compositor de bandas sonoras y otras hierbas es de admirar. La perplejidad del grupo de cuerdas de la Filarmónica ante sus ataques de "For Whom The Bell Tolls" o la brillante versión de "Battery" queda patente mientras Hetfield aulla sus "Hey Hey Hey" que merecen sin duda ver su cerebro atravesado por un arco de cello. Eso suponiendo que le quede algo de cerebro. claro.
No veo, pese a ello, que Metallica cayera en la prostitución más evidente al hacer este disco. Sus baladones babosos (ver Scorpions para hacer baladones sin ser babosos en tal medida) salen incluso reforzados de esa lucha entre melodías discordantes contra una puñetera orquesta sinfónica al completo, que ahogaría sin dudar al grupo si no fuera por la anteriormente citada producción. Una cosa tremenda, en términos técnicos, que obliga a quitarse el sombrero ante el presupuesto manejado para este evento. Los chicos de Metallica salen airosos de ese encuentro entre lo divino y lo mundano que dota al disco de un aire que creo ha sido injustamente vilipendiado por los fans de la banda. Basicamente los mismos que los descubrieron con el farragoso album negro y se atreven a acusarles de "comerciales" por experimentos de este calibre.
Un experimento que sin duda tiene poco de necesario, con versiones que aguantan el tipo con más prestancia que otras, lo cual no es de extrañar. Pero es un experimento que adopta la dimensión que posee tan solo porque el grupo al mando es Metallica. Y todo lo que hace Metallica es desmesurado, destripado, analizado y fist-fuckingzado hasta la médula, tan solo para provocar una dicusión entre sus fans. Sus temas chungos (más de dos y tres) siguen siendo chungos. Sus temas buenos (más de dos y tres) siguen siendo buenos. Si sus fans no son capaces de engullir estas reiterpretaciones sin complejos que hicieron huir cual conejo al amigo Jason Newsted es que no son fans de verdad, ya que, sin entrar en temas realmente terroríficos en su versión de estudio como "Fuel" o similares, lo que se ofrece aquí es un gigantesco experimento con ínfulas de grandes compositores que, desde luego, Kamen consigue no hundir con su grupo de músicos de verdad. Una banda de músicos que, dejada atrás su mala leche, evolucionan como mediocres compositores despojados de lo que de verdad les hizo únicos. Y aún así, tres cuernos se lleva en mi opinión un trabajo que, por pura valentía se merecería alguno más. Lástima que la valentía no cuente en este contexto de clásicos del Trash Metal, ya que todo lo que haga Metallica simpre estará sujeto al verdurelismo público. Y por mucho que estos chicos se empeñen, su música envejece diez veces peor que ellos, y eso ya es mucho decir.
#14ufff!!!
Que disco hombre....
quien dijo que algunas cosas no pueden juntarse...
Metallica y La Sinfonica de San Francisco, botan todos aquellos dichos antiguos....
Que magnifica mezcla de sonido por Dios....
Fuel, One, Master... que temas y como suenan...
Solo digo gracias por este delicioso album
#15El título de este concierto es un juego de palabras. La "S" de Symphony (Sinfónica) es una clave de sol invertida, que se utiliza al principio de los pentagramas en las partituras musicales, y la "M" de Metallica fue tomada del logotipo de la banda. S&M es también una abreviatura muy conocida de "sadismo y masoquismo" en el idioma inglés. Además algunos fans piensan que el título del álbum puede ser un homenaje a la canción con el mismo título de la banda Thin Lizzy, que es una de las influencias de Metallica.