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Creo que para cualquier oyente o para cualquier m�sico, "Ventriloquia" es un �lbum envidiable, de esos que te hacen plantearte todo lo que pueden dar de s� tres personas (me asombra bastante que s�lo sean tres), de esos que te hacen amar la m�sica, y de esos que consiguen que ans�es saber tocar un instrumento. Y si a uno le gusta escribir, las composiciones de este disco son como una suave patada en las narices que te hace plantearte que no sabes ni juntar cuatro palabras para crear una frase.
El primer punto a su favor lo ponen la calidad de la grabaci�n y de la producci�n, que han corrido a cargo de los estudios el Sotano (Artika) y Rock&rolo (Burgos) y de Iker Piedrafita. El segundo punto lo gana un libreto cuidado y esmerado. Y el remate final lo pone su m�sica, s� su m�sica, as� sin concesiones y con may�sculas.
Podr�amos hacerle un monumento a las letras, porque cualquiera que tenga sangre en las venas se quedar� impactado, otro a la voz del se�or Paco Juez, y otros dos a la bater�a de Gonzalo Cantero y a las Guitarras de Jorge Matute. Pero en este caso no hace falta construir una escultura como recuerdo ni como homenaje, porque como ya he comentado, ellos ya han creado nueve, empezando por "El disfraz" y terminando por "El traje que me viste".
Detr�s de un t�tulo tan complicado como "Ventriloquia" se esconde un aut�ntico regalo para los o�dos que viene aderezado por tres guindas, las de las exquisitas voces de Ricardo Llorente en "La boca del ca��n" y de Iker Piedrafita y Enrique Villareal en "Todav�a hay gente".
Creo que la canci�n m�s impactante de este disco, es sin duda alguna "La resistencia de las luces". Es un tema de esos que uno incluir�a entre las mejores canciones que ha escuchado. Alg�n d�a me har� un ced� de esos clasistas con los que uno escucha solo lo que realmente quiere escuchar y este tema seguro que estar� entre ellos, aunque tal vez deber�a hacer dos ced�s e incluir el de Entrev�as entero.
Probablemente "La resistencia de las luces" sea el corte m�s sobresaliente, pero tenemos otros que se quedan a la altura de notable alto, como "Todav�a hay gente" (que te da ganas de subir el volumen al m�ximo), o la guitarrera "Amor de tripas", o "Cuchillo y raz�n" (donde la letra brilla con luz propia), o la intimista "Cuando vuelva a empezar" o la que pone el broche final, "El traje que me viste", un tema muy marcado por la bater�a. No hay frase final tan impactante como para conseguir que den m�s ganas de escuchar este disco. No hay palabras posibles para expresar las ganas que desatan de verles en directo. Por si alguien no se acuerda se llaman Entrev�as y su disco "Ventriloquia". Nada m�s brillante se puede a�adir que lo que ellos mismos aportan.