Letra de Nada que perder - Sharif
Letra de canci�n de Nada que perder de Sharif lyrics
Dime qu� es un rey para un mendigo,
qu� es la suerte, qu� es la ley, qu� es el destino,
qu� es lo divino pal que vive en el alambre,
si la bendita fe no quita el hambre.
Dime c�mo se mide la vida y el infinito,
dime qu� es la justicia, cuando sobrevivir es un delito
dime si sabes c�mo silenciar el grito
que se posa en mi garganta igual que un p�jaro maldito.
Aprend� a vivir sin miedo, a cantar con furia,
a limpiarme las l�grimas con la lluvia,
ya desde ni�o con el hambre como escuela,
el mundo de recreo y la calle bajo mi suela.
Y no aprend� en el diccionario que quiere decir respeto,
el barrio entero tuve de alfabeto,
de m� pap� nunca jam�s tuve noticia
as� que tuve que aprender a aprender sin su caricia.
Y yo crec� corriendo como potro sin establo,
en un hombro Dios y en otro el diablo.
Quemando el presente, luchando a diario
con sangre impaciente, esperando que llegue lo extraordinario.
Y el barrio fue mi ruedo, la calle el juego
donde ni�os se hacen hombres, a sangre y fuego.
Y es justo luego cuando empiezas a entender
que si no se tiene nada ya no hay nada que perder.
Traemos malas noticias,
nuestra propia justicia,
no tenemos bandera
vivimos a la espera de un milagro que no llega.
https://www.coveralia.com/letras/nada-que-perder-sharif.php
Traemos malas noticias,
nuestra propia justicia,
no tenemos bandera
vivimos a la espera de un milagro que no llega.
Dime qu� es lo blanco y qu� es lo negro,
qu� es lo sano, qu� es lo malo, qu� es lo bueno.
�Pa' que rezar si nunca se cumplen los planes?
�D�nde est� el milagro de los peces y los panes?
Vamos dime, como llenas las horas de est�o
cuando el hast�o y el fr�o dejan tu pecho vac�o,
dime si est� seco el r�o, dime si queda inocencia,
en esta sociedad donde todo es apariencia.
Aprend� que nadie nace ni asesino ni culpable,
pero el destino a veces es un miserable,
suave y amable pone la miel en tu boca,
luego se equivoca y te mata cuando no toca.
Se�or�a, no espere que le pida perd�n,
no es rebeld�a, es poes�a por compasi�n,
si todav�a no hay culpa sin redenci�n,
yo tengo la sangre fr�a, pero ardiendo el coraz�n.
Porque crec� como las flores salvajes
en las esquinas y en el barro,
llevando un carro lleno de ruinas, pero feliz.
Sabiendo que la flor tiene ra�z,
cuidando los detalles en las calles y el matiz.
Que descubre lo valioso en la balanza,
nada es m�s peligroso que un hombre sin esperanza
tan solo somos agua en el molino
hijos de las estrellas y del polvo del camino.
qu� es la suerte, qu� es la ley, qu� es el destino,
qu� es lo divino pal que vive en el alambre,
si la bendita fe no quita el hambre.
Dime c�mo se mide la vida y el infinito,
dime qu� es la justicia, cuando sobrevivir es un delito
dime si sabes c�mo silenciar el grito
que se posa en mi garganta igual que un p�jaro maldito.
Aprend� a vivir sin miedo, a cantar con furia,
a limpiarme las l�grimas con la lluvia,
ya desde ni�o con el hambre como escuela,
el mundo de recreo y la calle bajo mi suela.
Y no aprend� en el diccionario que quiere decir respeto,
el barrio entero tuve de alfabeto,
de m� pap� nunca jam�s tuve noticia
as� que tuve que aprender a aprender sin su caricia.
Y yo crec� corriendo como potro sin establo,
en un hombro Dios y en otro el diablo.
Quemando el presente, luchando a diario
con sangre impaciente, esperando que llegue lo extraordinario.
Y el barrio fue mi ruedo, la calle el juego
donde ni�os se hacen hombres, a sangre y fuego.
Y es justo luego cuando empiezas a entender
que si no se tiene nada ya no hay nada que perder.
Traemos malas noticias,
nuestra propia justicia,
no tenemos bandera
vivimos a la espera de un milagro que no llega.
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Traemos malas noticias,
nuestra propia justicia,
no tenemos bandera
vivimos a la espera de un milagro que no llega.
Dime qu� es lo blanco y qu� es lo negro,
qu� es lo sano, qu� es lo malo, qu� es lo bueno.
�Pa' que rezar si nunca se cumplen los planes?
�D�nde est� el milagro de los peces y los panes?
Vamos dime, como llenas las horas de est�o
cuando el hast�o y el fr�o dejan tu pecho vac�o,
dime si est� seco el r�o, dime si queda inocencia,
en esta sociedad donde todo es apariencia.
Aprend� que nadie nace ni asesino ni culpable,
pero el destino a veces es un miserable,
suave y amable pone la miel en tu boca,
luego se equivoca y te mata cuando no toca.
Se�or�a, no espere que le pida perd�n,
no es rebeld�a, es poes�a por compasi�n,
si todav�a no hay culpa sin redenci�n,
yo tengo la sangre fr�a, pero ardiendo el coraz�n.
Porque crec� como las flores salvajes
en las esquinas y en el barro,
llevando un carro lleno de ruinas, pero feliz.
Sabiendo que la flor tiene ra�z,
cuidando los detalles en las calles y el matiz.
Que descubre lo valioso en la balanza,
nada es m�s peligroso que un hombre sin esperanza
tan solo somos agua en el molino
hijos de las estrellas y del polvo del camino.
