Letra de Matasue�os - Tako
Letra de canci�n de Matasue�os de Tako lyrics
He escuchado mil palabras
en menos de 10 segundos
torpemente embaucador.
"Haremos de ti una estrella
buscaremos un buen nombre,
que caliente m�s que el Sol".
Las manos avariciosas
que jam�s encallecieron
para hacer morir los sue�os
y comerse lo que fueron
nada basta, no es bastante
para resultar rentable,
escucha, el dinero grita:
"�Ven!"
Y es tanto lo que te piden
y tan poco lo que dan
que aunque nazcas ya est�s muerto
sin poderlo demostrar.
Los que dibujan el mapa
van modificando el mar,
al lado de sus antenas,
que todos escuchar�n.
https://www.coveralia.com/letras/matasuenos-tako.php
El silencio sin reparo,
las mentiras se presentan
a tama�o natural.
De las clases y portadas
a dos noches por semana
en un tugurio sin cobrar
Las manos avariciosas
que jam�s encallecieron
para hacer morir los sue�os
y comerse lo que fueron
nada basta, no es bastante
para resultar rentable,
escucha, el dinero grita:
"�Ven!"
Y es tanto lo que te piden
y tan poco lo que dan
que aunque nazcas ya est�s muerto
sin poderlo demostrar.
Los que dibujan el mapa
van modificando el mar,
al lado de sus antenas,
que todos escuchar�n.
en menos de 10 segundos
torpemente embaucador.
"Haremos de ti una estrella
buscaremos un buen nombre,
que caliente m�s que el Sol".
Las manos avariciosas
que jam�s encallecieron
para hacer morir los sue�os
y comerse lo que fueron
nada basta, no es bastante
para resultar rentable,
escucha, el dinero grita:
"�Ven!"
Y es tanto lo que te piden
y tan poco lo que dan
que aunque nazcas ya est�s muerto
sin poderlo demostrar.
Los que dibujan el mapa
van modificando el mar,
al lado de sus antenas,
que todos escuchar�n.
https://www.coveralia.com/letras/matasuenos-tako.php
El silencio sin reparo,
las mentiras se presentan
a tama�o natural.
De las clases y portadas
a dos noches por semana
en un tugurio sin cobrar
Las manos avariciosas
que jam�s encallecieron
para hacer morir los sue�os
y comerse lo que fueron
nada basta, no es bastante
para resultar rentable,
escucha, el dinero grita:
"�Ven!"
Y es tanto lo que te piden
y tan poco lo que dan
que aunque nazcas ya est�s muerto
sin poderlo demostrar.
Los que dibujan el mapa
van modificando el mar,
al lado de sus antenas,
que todos escuchar�n.