Letra de Tan Mia - Gemeliers
Letra de canci�n de Tan Mia de Gemeliers lyrics
Me pregunto si recuerdas
El valor de las promesas
Que me hiciste al volver de aquel lugar
Donde nadie te aceptaba
Pues tu cuerpo extra�aba
El calor de las personas de un hogar
Cuantas veces me llamaste
Y entre lagrimas juraste
Encadenarte a este amor eternamente
Y ahora vi�ndonos de nuevo
Tu me sueltas un no puedo
Disculp�ndote, pues todo es diferente
Cuando sientas, cielo mio
Por la noche escalofr�os
Son mis dedos resbalando por tu piel
Prometiste amor eterno, tantos besos que aun conservo
Mentiras pues son para el
Cuantas lunas he llorado
Por tu amor arrebatado
Desgarrada tengo el alma de dolor
Los cristales de tus labios
Se han clavado hasta brotar
La sangre de mi coraz�n
Como puedes humillarme, insultar luego marcharte
Destrozandome el veneno de tu piel
Y aun as� le ruego al cielo que ojala pudieras ser
Tan m�a, tan m�a
Ha pasado este verano
Se que tu lo has disfrutado
Para mi sin duda ha sido el peor
Y ahora vi�ndonos de nuevo
Comprend� que fue un juego
Entre manos y una piel sin coraz�n
Tu no olvides que aunque mienta
https://www.coveralia.com/letras/tan-mia-gemeliers.php
Disfrazando lo que sientas
Arda en ganas de morir en tu deseo
Pero duele el sentimiento
Al despertar la realidad
Sufriendo, pues ya no te tengo
Cuando sientas, vida m�a
Una brisa que te enfr�a
Es mi alma atraves�ndote sin mas
Por tus sue�os he luchado
Y sin pensarlo te he entregado
Mi vida, y ahora te vas
Cuantas lunas he llorado
Por tu amor arrebatado
Desgarrada tengo el alma de dolor
Los cristales de tus labios
Se han clavado hasta brotar
La sangre de mi coraz�n
Como puedes humillarme, insultar luego marcharte
Destrozandome el veneno de tu piel
Y aun as� le ruego al cielo que ojala pudieras ser
Tan m�a
Cuantas lunas he llorado
Por tu amor arrebatado
Desgarrada tengo el alma de dolor
Los cristales de tus labios
Se han clavado hasta brotar
La sangre de mi coraz�n
Como puedes humillarme, insultar luego marcharte
Destrozandome el veneno de tu piel
Y aun as� le ruego al cielo que ojala pudieras ser
Tan m�a
Tan m�a...
El valor de las promesas
Que me hiciste al volver de aquel lugar
Donde nadie te aceptaba
Pues tu cuerpo extra�aba
El calor de las personas de un hogar
Cuantas veces me llamaste
Y entre lagrimas juraste
Encadenarte a este amor eternamente
Y ahora vi�ndonos de nuevo
Tu me sueltas un no puedo
Disculp�ndote, pues todo es diferente
Cuando sientas, cielo mio
Por la noche escalofr�os
Son mis dedos resbalando por tu piel
Prometiste amor eterno, tantos besos que aun conservo
Mentiras pues son para el
Cuantas lunas he llorado
Por tu amor arrebatado
Desgarrada tengo el alma de dolor
Los cristales de tus labios
Se han clavado hasta brotar
La sangre de mi coraz�n
Como puedes humillarme, insultar luego marcharte
Destrozandome el veneno de tu piel
Y aun as� le ruego al cielo que ojala pudieras ser
Tan m�a, tan m�a
Ha pasado este verano
Se que tu lo has disfrutado
Para mi sin duda ha sido el peor
Y ahora vi�ndonos de nuevo
Comprend� que fue un juego
Entre manos y una piel sin coraz�n
Tu no olvides que aunque mienta
https://www.coveralia.com/letras/tan-mia-gemeliers.php
Disfrazando lo que sientas
Arda en ganas de morir en tu deseo
Pero duele el sentimiento
Al despertar la realidad
Sufriendo, pues ya no te tengo
Cuando sientas, vida m�a
Una brisa que te enfr�a
Es mi alma atraves�ndote sin mas
Por tus sue�os he luchado
Y sin pensarlo te he entregado
Mi vida, y ahora te vas
Cuantas lunas he llorado
Por tu amor arrebatado
Desgarrada tengo el alma de dolor
Los cristales de tus labios
Se han clavado hasta brotar
La sangre de mi coraz�n
Como puedes humillarme, insultar luego marcharte
Destrozandome el veneno de tu piel
Y aun as� le ruego al cielo que ojala pudieras ser
Tan m�a
Cuantas lunas he llorado
Por tu amor arrebatado
Desgarrada tengo el alma de dolor
Los cristales de tus labios
Se han clavado hasta brotar
La sangre de mi coraz�n
Como puedes humillarme, insultar luego marcharte
Destrozandome el veneno de tu piel
Y aun as� le ruego al cielo que ojala pudieras ser
Tan m�a
Tan m�a...
