Letra de L�grimas De Una Guitarra - Andres Martinez
Letra de canci�n de L�grimas De Una Guitarra de Andres Martinez lyrics
Tocando sin tregua en cualquier caf�,
atado a su guitarra se deja la piel,
compartiendo sus curvas con las de su mujer,
ella siempre le espera, �l lo sabe bien.
Toda una vida entera detr�s del tel�n
las luces ya lo ciegan, comienza otra actuaci�n,
cruzando la frontera va su imaginaci�n
dirigiendo la orquesta en que cantaba yo.
Un cruce de caminos, siempre en el ojo del hurac�n,
portentoso talento, las manos llenas de humanidad,
toca sin ataduras, rockeando del blues al jazz
y hablando a su guitarra, Salvi la hace llorar.
https://www.coveralia.com/letras/lagrimas-de-una-guitarra-andres-martinez.php
Las yemas de sus dedos puros surcos son,
las marcas que el acero en su piel grab�
y a�n recuerda aquel tiempo en que empez� a tocar,
su padre le miraba, era la se�al.
Toda una vida entera detr�s del tel�n,
con cada cuerda vibra tambi�n su coraz�n
y por sus venas corren en cada canci�n
arm�nicos compases que �l mismo escribi�.
Un cruce de caminos siempre en el ojo del hurac�n,
portentoso talento, las manos llenas de humanidad,
toca sin ataduras, rockeando del blues al jazz
y hablando a su guitarra, Salvi la hace llorar.
atado a su guitarra se deja la piel,
compartiendo sus curvas con las de su mujer,
ella siempre le espera, �l lo sabe bien.
Toda una vida entera detr�s del tel�n
las luces ya lo ciegan, comienza otra actuaci�n,
cruzando la frontera va su imaginaci�n
dirigiendo la orquesta en que cantaba yo.
Un cruce de caminos, siempre en el ojo del hurac�n,
portentoso talento, las manos llenas de humanidad,
toca sin ataduras, rockeando del blues al jazz
y hablando a su guitarra, Salvi la hace llorar.
https://www.coveralia.com/letras/lagrimas-de-una-guitarra-andres-martinez.php
Las yemas de sus dedos puros surcos son,
las marcas que el acero en su piel grab�
y a�n recuerda aquel tiempo en que empez� a tocar,
su padre le miraba, era la se�al.
Toda una vida entera detr�s del tel�n,
con cada cuerda vibra tambi�n su coraz�n
y por sus venas corren en cada canci�n
arm�nicos compases que �l mismo escribi�.
Un cruce de caminos siempre en el ojo del hurac�n,
portentoso talento, las manos llenas de humanidad,
toca sin ataduras, rockeando del blues al jazz
y hablando a su guitarra, Salvi la hace llorar.