Letra de Chica Standard - Luis Quintana
Letra de canci�n de Chica Standard de Luis Quintana lyrics
Ella eligi� ser una chica standard
de buena carrera,
de sue�os con airbag,
de cruz en el cuello,
de mecha en las canas,
pas� por la vida crey�ndose humana.
Ella eligi� ser una chica standard
de gafas al pelo como una diadema,
de l�nea en los ojos,
tal cual su camino,
de noche en la cama junto a su enemigo.
Ella eligi� ser una chica standard
de un andar cruzado,
del �voy a la moda"
la de amor usado,
la del whisky-cola,
la de "ven m�s pronto que me siento sola".
La del oca a oca
sin tirar los dados.
https://www.coveralia.com/letras/chica-standard-luis-quintana.php
La de anillo y boda
con el traje blanco.
La de amor usado.
La del whisky-cola.
La de "ven m�s pronto que me siento sola�
Ella eligi� ser una chica standard
de jueves, revistas,
de enero, rebajas,
de estrella sin reyes,
de rey sin estrella
y el domingo en misa se confiesa bella.
Ella eligi� ser una chica standard,
la tal Susanita
ahora ya es Susana,
la de ropa oscura
que es la que no engorda,
la que quiere al hombre veinticuatro horas. (bis)
de buena carrera,
de sue�os con airbag,
de cruz en el cuello,
de mecha en las canas,
pas� por la vida crey�ndose humana.
Ella eligi� ser una chica standard
de gafas al pelo como una diadema,
de l�nea en los ojos,
tal cual su camino,
de noche en la cama junto a su enemigo.
Ella eligi� ser una chica standard
de un andar cruzado,
del �voy a la moda"
la de amor usado,
la del whisky-cola,
la de "ven m�s pronto que me siento sola".
La del oca a oca
sin tirar los dados.
https://www.coveralia.com/letras/chica-standard-luis-quintana.php
La de anillo y boda
con el traje blanco.
La de amor usado.
La del whisky-cola.
La de "ven m�s pronto que me siento sola�
Ella eligi� ser una chica standard
de jueves, revistas,
de enero, rebajas,
de estrella sin reyes,
de rey sin estrella
y el domingo en misa se confiesa bella.
Ella eligi� ser una chica standard,
la tal Susanita
ahora ya es Susana,
la de ropa oscura
que es la que no engorda,
la que quiere al hombre veinticuatro horas. (bis)